Antes de Harry Styles, los Jonas Brother o cualquier idol coreano, estuvo Luis Miguel ese niño super talentoso que creció para convertirse en un muchacho guapo de melena gigantesca, típica de los ochentas. De eso a un joven elegante que se robaba todos los corazones en los noventas, y principios de los 2000, y finalmente en lo que hoy vemos de él. Pero todo eso es otro tema y si quieren cachar la vida y los dramas del Sol de México, pueden ir a ver su serie en Netflix, aprovechen que ya mismo sale la segunda temporada.
Alcanzaría el éxito desde temprana edad, gracias a sus exitosos álbumes cargados con un estilo pop y lleno de tremendos sencillos tales como: La incondicional, Ahora te puedes marchar y Culpable o no. Es aquí cuando aparece Romance, siendo I-CÓ-NI-CO, por ello tuvo más secuelas que Rocky (Segundo Romance, Romances, Mis Romances, Etc.) Esto llevo a Luismi a la fama mundial.
Pero como todo niño superestrella, empezó a tener problemas con el alcohol, lo cual no le permitía actuar correctamente en sus shows y tuvo algunos declives en su carrera. A pesar de esto Luis Miguel sigue siendo una figura representativa en la música mexicana y latinoamericana.
El Romance que lo empezó todo
“No hay nada nuevo, y toda novedad no es nada más que recordar algo que habíamos olvidado”. Francis Bacon decía esto por allá en el siglo XVI, pero en palabras más bonitas y yo las traigo a colación porque justamente eso es Romance, recordar a los clásicos del bolero y darles nueva vida en la voz de Luis Miguel. Este disco a pesar de que salió a las prisas y de chiripazo, debido al contrato que Luismi tenía con su disquera, resulto ser todo un éxito y traer reinterpretaciones maravillosas de los boleros que ya parecían estar empolvándose en la vitrina.
Armando Manzanero, gran cantautor mexicano fungió como productor de todo este álbum, su trabajo y experiencia en el campo permitieron que el proyecto tomara cuerpo, pues fue el quien selecciono cuidadosamente las 12 canciones que formarían parte del disco. Manzanero escogió los mejores temas románticos de sus colegas compositores y dos de las suyas para brindarle su identidad a Romance. Por otra parte, Bebu Silvetti fue el encargado de crear los arreglos y armonías, realizo un trabajo impresionante al adaptar estas doce canciones a un sonido más actual. Cuando uno escucha los clásicos, los cuales son principalmente de los años 50s se sienten como esas películas viejitas hechas en blanco y negro, o en tono sepia, mientras que las reinterpretaciones de Romance tienen una vibra nueva y actual, incluso con pequeños tintes pop que era lo que venía haciendo Luis Miguel anteriormente, pero siguen teniendo el sentimiento y la teatralidad que hacía grandes a sus versiones originales. Este contraste entre lo antiguo y lo nuevo se puede apreciar claramente en una presentación que Luis Miguel hizo con Lucho Gatica en la que interpretan No me Platiques más y La Barca. La voz de Gatica es más dura y rasposa que la del Sol.
Justamente no me platiques más es la canción con la que el disco nos recibe, con ella se demuestra desde el primer momento la importancia que van a tener las cuerdas en el transcurso del álbum y la suavidad y profundidad que otorga la interpretación de Luismi a estas nuevas canciones. Continuando con Inolvidable tenemos una producción mucho más adaptada a los 90s debido a los coros y la percusión, pero que conserva esa fuerza del bolero gracias a la trompeta. Cuando llegamos a La Barca y Te Extraño nos llevamos la mejor de las sorpresas, son canciones que tienen muy presente el sentimentalismo del bolero, inclusive casi al final de La Barca escuchamos un coro igual al de los tríos clásicos del bolero. Te Extraño por su parte tiene una producción mucho más sutil, que solo sube en los momentos de dramatismo, esto provoca un sentimiento de soledad que en conjunto con la letra y la desesperación que se siente en la voz, evoca una gran tristeza.
Como decía antes las cuerdas tienen gran importancia para crear el aura de este disco, los violines grabados en vivo lo dotan de una gran elegancia. muy presente en canciones como Contigo en la Distancia, La Mentira o No sé tú. esta última posee además un timing en la interpretación que eleva poco a poco la teatralidad. En general el Sol usa todas estas letras tan sentimentales a su favor por ello versos como: “Pues llevamos en el alma cicatrices, Imposibles de borrar” hacen de La Mentira una canción de reproche y desamor perfecta. Versos así se nos quedan gravados, y es que como el mismo dice “para querer no necesito una razón” pues a este disco le sobra mucho pero mucho corazón.
Legado
No hay verdad más cierta que sin sus discos de boleros, Luis Miguel no sería lo que es hoy. Sí, el pop es el género que lo hizo reconocido pero los boleros lo consagraron como un gran artista, no solo talentoso sino arriesgado y versátil. Romance definió su futuro como interprete, por eso tuvo varios sucesores (ok tal vez no tantos como películas de Rocky). En Segundo Romance hizo lo que yo considero como su obra maestra “La Media Vuelta”. También incursiono en géneros como el mariachi el cual lo hizo cultivar más éxitos.
Romance es un disco sencillo pero muy genuino y totalmente bien logrado, tanto que logro revitalizar por completo a un género considerado anticuado. El trabajo de Manzanero en la producción consiguió que años de música llegaran a una nueva época y que cobraran relevancia de nuevo. Nos devolvió lo pasional y sentimental del bolero y eso, vale oro.
Parlantómero
Clásico
Vayan a escuchar Romance, es una muy buena opción para volver a tener los sentimientos a flor de piel. Regresar a los clásicos puede ser una muy buena idea y si no me creen pregúnteles a los del Renacimiento.
Canciones Favoritas
No Me Platiques más
La Barca
Te Extraño
No Sé Tú
Escucha Romance:
Romance (1991) es un trabajo de Luis Miguel, propiedad de Warner Music.
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