La carrera de Charli es una de las más interesantes para hablar. Su comienzo fue dimensionalmente distinto al punto en el que su carrera ha llegado hoy en día, al menos en lo que calidad refiere.
Y aunque siempre ha mostrado un interés muy obvio por los sonidos digitales, muy correspondientes a la onda del y2k, no fue hasta su legendario EP, Vrom Vrom que las cosas empezaron a escalar vertiginosamente, hasta el punto que hoy nos concierne.
La historia de Charli es una de incasable búsqueda por superarse y mostrarse de la forma más autentica posible, todo esto frente a una industria que constantemente les mete el pie a las ideas subversivas y premia lo convencional.
Aun así, aquí estamos, frente a lo que fácilmente podría ser la obra maestra de Charli xcx.
famosa… pero no tanto
Antes de entrar de lleno en esta reseña creo que es importante decir que estaré abordando la versión deluxe de brat, que es básicamente la misma que la original, pero con tres canciones extra, así que no lo es.
Dicho esto, pongamos a grandes rasgos cual viene a ser la temática general del álbum.
Ante nosotros tenemos un rave acelerado y potente de hyperpop, house, pc music, glitch y toda la cosa experimental-diferente del pop que no estamos acostumbrados a escuchar en las radios o listas. El álbum sigue una estructura bastante cíclica en sus beats y coros, pero también en el significado detrás de sus letras, que me parece el primer punto importante del que se debe hablar.
A lo largo de brat, Charli explora y crítica varias de sus experiencias dentro del mundo de la fama y de su vida en general. Se reconoce a ella como una figura icónica del mundo pop pero también le lanza flores a aquellos artistas de los que ha aprendido, como a su productor de confianza A.G. Cook y a la difunta SOPHIE. En esta vibra van tracks como 360 o Club Classics.
En esta misma arista de la iconicidad, Charli habla sobre como a pesar de no ser tan famosa, como otrxs famosxs, sigue siendo lo suficientemente influyente para crear hits, marcar tendencia y se burla de las premiaciones o revistas de chisme que la hacen de menos.
Aborda varios tipos de inseguridades como las: de la edad, maternidad, talento, relaciones amorosas y sociales. Charli consigue lanzar mensajes potentes que están dispersos entre canciones de tempo acelerado y ambiente fiestero, pero también en baladas hyper-pop que no se apartan de las distorsiones, pero muestran un lado más sutil y apagado de la fiesta.
También explorar varias situaciones de la vida cotidiana, como la falsa simpatía que a veces puede existir entre las personas, y como ella mismo puede caer en este tipo de mentira con tal de convivir, aunque esto muchas veces le produce ansiedad.
Creo que uno de los principales aciertos en este apartado es que Charli no se retrata así misma como una víctima de estas situaciones, sino que muchas veces habla de sus propias actitudes cuestionables. Por eso, vuelvo a mencionar que todo esto forma parte de un ciclo, en el sentido de que son situaciones por las que ella atravesó, o sigue atravesando, e incluso sigue perpetuando.
De igual manera las canciones están cargadas de tantas referencias que me es difícil si quiera comprender todas. Esto es la navidad de la gente crónicamente en línea, pues desde lo visual hasta lo sonoro hay una gran mención de eventos pop, jerga del internet, figuras prominentes de las redes y del arte, entre muchas otras cosas que de seguro van a picarle la espinilla curiosa a más de uno.
Como mencione antes, Charli se permite ser bastante emotiva y reflexiva. Uno de los puntos más importantes donde hace esto es en So I, una canción dedicada a su antigua colaboradora y amiga, SOPHIE, quién fue un icono absoluto en la escena de la música electrónica y del hyperpop.
En este tema Charli explora de forma muy honesta su amistad con la productora y lo mal que se siente de no haber podido apreciar y compartir más momentos juntas. El glitch hacia el final le da un toque desgarrador a la voz de la cantante lo cual hace que conectes demasiado con su dolor y perdida.
Otro tema que Charli le da bastante importancia es su relación con otras mujeres. Algo que discute en Sympathy is a Knife y más a profundidad en girl, so confusing. La artista explora como muchas veces hay una sensación de incomodidad cuando convive o se compara con otras mujeres de su vida, o incluso del como los medios y el público en general comparan a Charli con otras artistas. En este caso específico voy a mencionar a Lorde, pues parece ser que girl, so confusing iba dirigido hacia ella y esto hace más sentido con el reciente remix del track, en el cual ambas colaboran y parecen sanar sus diferencias por medio de la música.
A lo largo del disco Charli se muestra increíblemente vulnerable, mostrando un lado profundo y honesto de ella como persona y artista. Cuestionando su lugar en la industria musical, la vida y reflexionando sobre como ha llegado hasta el punto en el que está hoy.
Pero también se permite ser alocada, divertida, coqueta y cargada hasta arriba de drogas, con el fin de mantener la fiesta viva. Se nota que Charli conoce bastante bien la cultura de la música electrónica y del DJing, lo cual tiene sentido considerando la gente con la que se junta y los escenarios en los que se ha presentado.
Es el equilibro perfecto entre estas atmosferas e ideas disonantes, lo que le da una transparencia absoluta al disco. Se nota que esto es lo que la artista quería hacer como proyecto y que no hubo mucha (o ninguna) metida de mano ejecutiva.
bumpin’ that
Ahora, entrando en el segundo factor estrella del disco hablemos de la exquisita producción.
Es increíble como brat esta tan cargado de bangers. Me tomo un buen rato decidir mis canciones favoritas (y hasta hice un poco de trampa para la reseña en video), porque todas me encantaron. Claro, hay canciones que pegan más duro que otras, pero la sinergia que el álbum tiene es algo mágico, más aún si tomamos en cuenta que hay una variedad gigantesca de elementos sonoros.
Charli y sus productores juegan mucho con sonidos que no necesariamente vienen de instrumentos musicales, como los sonidos de grabadora en rewind o los flashes de foto en 360. Hay una atención al detalle muy perfeccionista por hacer que cada canción se sienta como una bestia propia y se juega mucho con las repeticiones, glitchs, distorsiones, synths y drops para crear una experiencia única.
El elemento conceptual de los ciclos esta muy presente en lo sonoro, por el como progresan los beats y como Charli usa coros pegadizos y repetitivos para que se te queden atascados en la cabeza. Incluso puedes llegar a escuchar brat (la versión OG) en un ciclo infinito de repeticiones gracias a que 365 samplea el tema de inicio 360, causando un loop mental bien bacán.
Algo que me encanta es que cada tema está muy contenido en sí mismo, pocas son las canciones que sobrepasan los 3 minutos y ninguna llega a los 4. Hay un trabajo de curaduría muy pulcro para saber exactamente donde parar y darle paso al siguiente track, lo cual se alinea bastante con la música de clubs. Apenas algo pueda estar empezando a aburrirte (lo cual es una locura, ¿cómo podrías aburrirte de esta nota?) va a llegar algo nuevo que te de una bofetada en la cara y te empuje a bailar (o llorar, como ya dije hay muchos momentos emotivos).
Creo que dentro de todo y a pesar de que el hyperpop no es el género mainstream más convencional, este disco es increíblemente accesible por los motivos que ya mencioné previamente y eso es algo muy bueno.
A más de Charli, quien trabajo en la producción de varios de los temas, hay que aplaudir a George Daniel (prometido de la artista), EASYFUN, El Guincho, Cirkuit, Jon Shave, Lotus IV, The Dare y otros productores que participaron en brat. Pero principalmente hay que reconocer a A.G. Cook, constante colaborador de Charli y productor de una gran mayoría del LP. Este hombre sin duda entiende de manera muy precisa y meticulosa el estilo de la artista y la ayudó a alcanzar su máximo potencial artístico.
Si hay una lección que sacar aquí es que: trabajar con panas puede hacer todo mucho más divertido y honesto.
la reseña del deluxe, que es solo un poco más, entonces es lo mismo…pero no lo es
Las 3 canciones agregadas en la versión deluxe son la cereza del pastel. Siento que habrían quedado bastante bien para el disco original, pues no rompen nada de lo propuesto, más bien aportan a mantener este loop de fiesta y descontrol al máximo.
En especial Spring breakers, la cual si o si debió estar en el disco principal porque sigue agregando más capas a esta crítica que Charli hace sobre la industria musical, en especial hacia los Grammy’s con los cuales no parece tener una buena relación.
A más de eso, el beat es tan bueno y duro que parece que a cualquier rato salta Charli a sacarte la puta.
Ya quiero escuchar ese disco de remixes, considerando lo increíble que estuvieron las canciones junto a Billie y Lorde.
Parlantómetro
brat: 4.9 / 5
brat and it’s the same but there’s three more songs so it’s not: 5/5
Este es sin duda uno de los mejores discos del año sino es que el mejor. Escuchen brat chucha tu madre.
Canciones Favoritas:
360
Club classics
Symphathy is a knife
I might say something stupid
Talk talk
Von dutch
Everything is romantic
Rewind
So I
Girl, so confussing
Apple
B2b
Mean girls
I think about it all the time
365
Hello goodbye
Guess
Spring Breakers
Escucha brat and it’s the same but there’s three more songs so it’s not en:
brat and it’s the same but there’s three more songs so it’s not (2024) es un trabajo de Charli xcx, propiedad de Atlantic Recording Corporation.
Todas las imágenes utilizadas pertenecen a sus respectivos propietarios, fotógrafos y/o al/ a la artista/s representadx/s en ellas.
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