El impacto que el músico mexicano, Ed Maverick, ha tenido en Latinoamérica ha sido uno de esos extraños, pero interesantes fenómenos que uno simplemente no puede ignorar. A pesar de su corta edad, Ed consiguió algunos de los números más altos que se han visto en años recientes en lo que refiere a música latina, hecho que también es sorpréndete pues su estilo no estaba nada cerca de ritmos más urbanos, es más, su estilo apelaba mucho a la música ranchera.
Sus letras tristes, jerga juvenil y estilo “asthetic” se unieron con cemento de contacto al corazón y mente de millones de jóvenes. Sin embargo, aquello que mayor fama le trajo a Ed, fue también el motivo principal de una gran campa de trolling, la cual repercutió en el imaginario que existe alrededor de Ed y su música, lo cual es una verdadera pena. Todo este trasfondo, y otros pasajes personales de la vida del músico, lo llevarían a crear su álbum más personal hasta la fecha, eduardo.
Lágrimas de adulto
Debo admitir que Nunca fui alguien que pudiese conectar mucho con la música de Ed, la gran campaña de odio que se difundió contra el artista tuvo algo que ver, pero lo cierto es que, aunque decidí volver a escuchar sus proyectos previos, sigo sin encontrar el vinculo suficiente como para que me agraden. Hay unas cuantas canciones que considero atractivas, pero no mucho más allá de ello. Por eso al aventurarme a este disco no sabía muy bien que esperar y la verdad me inclinaba por creer que este álbum sería un desastre en todo sentido, aún más después de haber escuchado el EP, ESTO NO TIENE NADA QUE VER CON eduardo, un pequeño disco hecho con canciones ha medio coser que no acabaron de entrar en eduardo. Dicho título no pudo vaticinar mejor lo que este proyecto significa, porque a nivel de producción, lírica, voz, estética y simbolismo, este LP no tiene que ver con ese maltratado EP.
eduardo, es un proyecto sumamente personal, donde Ed Maverick pone su corazón al desnudo para crear canciones que conecten a un nivel profundo con quienes la escuchen, aun cuando, a grandes rasgos, este sea un álbum bastante sencillo. Con esto me refiero a que a nivel de letras y trabajo instrumental no hay nada muy rimbombante, lo cual le va de maravilla al concepto que este álbum maneja. Es una de esas ocasiones donde menos significa mucho más.
Vale aclarar que esto no significa que la producción de este LP sea perezosa o monótona, todo lo contrario, es el trabajo con mejor producción que Ed ha sacado en toda su carrera, pues mantiene la estética “indie” y triste que ha caracterizado su paso por la música, pero lo eleva a un nuevo nivel, optando por añadir coros espectrales, sintetizadores, lluvia, ruido blanco, trompetas y un aura más “cinematográfica”, esto último es algo que se le puede agradecer a Camilo Froideval, quien ha trabajado en bandas sonoras de películas y series de televisión como Luis Miguel y para esta ocasión fue el productor de cada una de las canciones que se escuchan en el disco, incluso podemos escuchar su voz en contenta, un track bastante emotivo y paradójico en su significado, acerca de lo que implica terminar una relación.
Y es en las relaciones que recae el punto fuerte de eduardo, pues este es un álbum cuyo concepto gira en torno a las relaciones humanas, la incertidumbre y las pasiones. Para lograr encapsular este mensaje, el álbum conecta casi todas las canciones entre sí, pues el final de una da inicio a la otra, lo cual a veces causa que no sepas bien cuando empieza un nuevo track hasta que escuchas a Ed cantar y descubres el significado que cada canción tiene por sí misma.
En este aspecto es la primera parte del álbum la que mejor consigue abarcar esta cohesión entre temas. Con Hola ¿Cómo estás?, ensenada, mantra I y II, contenta, ,atnetnoc y ¿Por QUÉ LLORAS? El músico consigue soltar una balada emocional tras otra, donde nos describe el paso de una relación amorosa desde que las personas se conocen hasta que se separan y empiezan un camino distinto cada una, culminando de forma muy intima con ¿POR QUÉ LLORAS? el cual es un interludio en el que podemos escuchar a Ed llorar, lo cual ayuda a sostener un vinculo personal entre el artista y su audiencia.
Tras ello el álbum se reinicia de cierta forma y se enfoca más en el miedo hacia el futuro y la ansiedad que le ha provocado la fama a Ed Maverick. En ese sentido, niño, y días azules son dos tracks que topan este tema de forma muy conmovedora. En especial el primero de estos pues describe esa horrible sensación de sentirse asfixiado por la vida adulta y el cambio constante, cosas que a uno lo hacen volver a querer ser un niño. La guitarra que acompaña el track ayuda a mantener una vibra de road trip melancólico, pero existe una disonancia en esta canción, la cual es la colaboración del rapero Muelas de Gallo, quien tiene un verso sobre una pista más distorsionada y electrónica. Aunque es un momento bastante extraño y algo peculiar, no siento que sea malo porque el rapero consigue integrarse en la estética del disco y su verso sirve para complementar el significado de la canción, ya que sirve como un recurso narrativo que explica otras formas de hacerle frente a la ansiedad, fuera de los vicios u otras actitudes nocivas.
Tras ello tenemos días azules que podría ser entendida como una canción de pandemia, pero también abarca la sensación de desanimo y monotonía que uno enfrente al sentirse deprimido y estancado. Para “cerrar” el disco esta gracias, un tema en el que Ed lucha con su fama, pues siente que no es del todo merecida y por ello no sabe muy bien como lidiar con ella. El coro es una de las partes más sentidas de todo el disco y tal vez uno de las letras que mas se quedaron grabadas en mi mente.
Si bien esta canción sirve para cerrar el álbum como concepto, luego de ello suena Nos queda mucho dolor por recorrer., canción que interpreto como un nuevo comienzo, en el sentido que todos los viajes de la vida están llenos de emociones, como el dolor, pero que en algún punto todos terminan y esto da paso a una nueva etapa, donde uno puede llegar a experimentar más dolor. Esto también aplica hacia Ed quien en esta canción habla sobre lo duro que ha sido sobrellevar el hate que ha recibido por parte de gente que ni siquiera lo conoce, aún más por hacer dedicarse a algo que el ama, como lo es la música.
Algo que me resulta bastante conmovedor es que Daniel Quién escribió parte de esta canción pensando en Ed y en lo que el ha tenido que experimentar a lo largo de su carrera, lo cual es un gesto de amistad muy único. Por otra parte, siento que esta canción no es del todo un cierre depresivo, sino que ofrece un comienzo con nuevas oportunidades, metas y objetivos, aun cuando esto implique volver a pasar por mucho dolor.
Ed Maverick ha mejorado bastante en su canto y estética, ya no fuerza su voz como antaño y ahora sus letras han abandonado ciertos modismos mexicanos para apelar a un público más amplio. Incluso el sonido esta más alejado de la música norteña y se acerca más al folk. Todo esto ha ayudado a crear un álbum con un concepto mucho más maduro y fuerte, en el que ya no se siente a Ed como un adolescente que pretende ser más inteligente y profundo de lo que en verdad es, ahora el mensaje se siente bastante genuino y por ello es más fácil empatizar con este.
Aun a pesar de que el álbum me lleva a sentirme identificado con Ed, no es precisamente porque sus emociones sean similares a las que siento en este momento, sino porque me permiten conectar con pasajes tristes de mi vida, pero desde una vista segura y hasta catártica. Creo que esta es una sensación que puede ayudar a más personas a conectar con este disco aún cuando no estén dentro del rango de edad al que el álbum puede estar apuntando.
PARLANTÓMETRO
4.3 / 5
Con eduardo, Ed Maverick sobresale como uno de los mejores en un estilo saturado de músicos y proyectos mediocres.
Canciones Favoritas
Hola ¿cómo estás?,
ensenada,
mantra I,
contenta,
¿POR QUÉ LLORAS?,
días azules,
niño,
mantra II,
gracias,
nos queda mucho dolor por recorrer.
Escucha eduardo:
eduardo (2021) es un trabajo de Ed Maverick, propiedad de Universal Music Mexico S.A.
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